Nehodí se? Vůbec nevadí! U nás můžete do 30 dní vrátit
S dárkovým poukazem nešlápnete vedle. Obdarovaný si za dárkový poukaz může vybrat cokoliv z naší nabídky.
30 dní na vrácení zboží
En 1985 se desenterró en Brasil el cuerpo de uno de los últimos criminales de guerra nazi que quedaban sin juzgar, Josef Mengele. El complejo proceso de identificación de los huesos abrió una "tercera narrativa" en las investigaciones de crímenes de guerra -tras la del documento o la del testigo- incorporando una aproximación forense para la comprensión de los crímenes de guerra y los crímenes contra la humanidad. La introducción de estos objetos en los juicios trajo consigo complicaciones estéticas, políticas y éticas que evidenciaban las dificultades para lograr una alternativa fija y estable a las incertidumbres, ambigüedades y ansiedades del testimonio humano. ¿De qué manera, se preguntan Keenan y Weizman, se les puede hacer hablar a los restos físicos de un muerto?